La insignia consiste en una cruz esmaltada de rojo oscuro, con un filete de oro, cargada por un círculo de oro con el águila bicéfala, emblema de Bizancio, esmaltada de blanco y luciendo en el pecho la cruz de Justiniano II. El reverso es liso, dorado, con un Escudo Nacional en la parte superior y la fecha 1990 en la inferior. La insignia pende de un collar dorado de 11 milímetros de ancho por sesenta centímetros de largo.

En un principio sirvió de símbolo a los miembros titulares del Instituto Argentino de Ceremonial. Con posterioridad fue creado el Collar de Honor, cuya insignia es igual a la anterior, con el agregado de una corona de laureles esmaltada de su color natural de la que pende la cruz.

Las damas pueden lucir la insignia sobre la parte izquierda del pecho, sujeta con una cinta de seda roja y blanca. Los recipiendarios usan en la solapa el distintivo de la Orden, que consiste en un águila bicéfala esmaltada de blanco. Las damas usan la misma pieza sobre un círculo de oro.

Acompaña el collar un diploma signado por el Gran Maestre, el Canciller y el Secretario, en el que consta que es otorgado "en virtud de su adhesión a los ideales éticos y las normas que destacan el alto significado del Ceremonial, en el contexto del mejor entendimiento entre los hombres y entre los pueblos".

La Orden del Águila Bicéfala otorga, también, una Medalla de Honor destinada a distinguir a instituciones y personas que "hayan realizado valiosos trabajos acerca del Ceremonial o contribuido a la difusión del conocimiento de la obra que el Instituto realiza". Es de plata, de treinta milímetros de diámetro. En el campo lleva el Águila Bicéfala y la inscripción en relieve "Instituto Argentino de Ceremonial".

Esta Orden ha sido conferida a distinguidas personalidades argentinas, a embajadores acreditados ante el Gobierno Nacional y también a la bandera del Regimiento Granaderos a Caballo General San Martín.